En el municipio de Cangas do Morrazo (Pontevedra), concretamente en la parroquia de Aldán, hay un pazo conocido como La Torre de Aldán que perteneció a los Condes de Canalejas.
El pazo tenía una enorme finca que los Condes utilizaban para actividades lúdicas como la caza o jugar al croquet pero al construir la carretera la finca quedó dividida siendo donada al concello de Cangas para uso y disfrute de los vecinos.
Esta finca es la Finca de Frendoal popularmente conocida como el Bosque Encantado de Aldán y, aunque a día de hoy ha sido comprada por una familia, todavía es posible caminar por ella.
Rodeados de robles, castaños y abedules cubiertos de mantos verdes sentiremos que nos adentramos en un mundo mágico en el que además encontraremos los restos de un castillo que nunca se llegó a terminar y el Arco dos Mouros, un acueducto de mampostería que era el que abastecía de agua al pazo. Originalmente tenía dos arcos pero en la actualidad solo se conserva uno.
Llena de senderos acompañados del sonido del río Orxas, si continuamos río arriba también podremos ver una serie de antiguos molinos.
Cómo llegar
En la carretera de Bueu PO-315, enfrente del pazo Torre de Aldán, veréis un un viejo puente medieval al lado de un lavadero y una pequeña zona para aparcar. Siguiendo la carretera del lavadero río arriba, a unos 50 metros a la izquierda está la entrada bastante rodeada de vegetación. No hay señal de ningún tipo pero es por ahí. Pronto os daréis cuenta que estáis en el lugar correcto.
El aura que desprende este lugar es tan mágica como tétrica pero que no dejará indiferente a nadie.
Y a ti, ¿te apetece hacer un retroceso en el tiempo perdiéndote en este lugar😍?